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El recluso Iván Buenaventura Alegría Cardoza, sentenciado a pagar 35 años de cárcel, que concluyen en el año 2032, solicitó la libertad condicional anticipada; sin embargo, no gozará del beneficio. Así lo determinó la jueza Primero de Vigilancia Penitenciaria de Santa Tecla.
La decisión de la titular del Juzgado fue tomada al marco del informe criminológico elaborado por un grupo de profesionales sobre la aptitud de adaptación, grado de agresividad o peligrosidad del condenado, entre otros aspectos evaluados.
Alegría Cardoza fue condenado por realizar varios abusos en contra de mujeres que interceptaba en estacionamientos de centros comerciales, acechaba a sus víctimas desde autos polarizados y las sometía con violencia, utilizando un arma de fuego.
A través de una conexión virtual desde el Centro Penal La Esperanza, pidió a la jueza considerar su participación en programas de readaptación; sin embargo los dictámenes psicológicos del informe emitido por el Consejo Criminológico arrojaron que el condenado tiene déficit de acciones empáticas, un nivel de agresividad medio y una adaptación social baja. “No puedo otorgar el beneficio de la libertad anticipada”, indicó la funcionaria.
Iván Buenaventura Alegría Cardoza fue condenado al pago de responsabilidad civil de $800.00 dólares por víctima, 7 de acuerdo a la fiscal del caso, y a purgar 107 años de cárcel, pero de conformidad al artículo 71 del Código Penal, en relación a la penalidad del concurso real de la pena, únicamente deberá cumplir 35 años de prisión.