Foto: @Beryz10
Esperancita es una perrita que meses atrás perdió a su madre y a sus hermanos caninos, luego de que estos fueran atropellados y luego lanzados a un basurero.
Tras la coordinación de varias personas y una fundación de rescatistas se logró evitar que Esperanza corriera la misma suerte que los demás perros y así es como fue trasladada a un clínica veterinaria en San Salvador.
Luego de varios meses de intervención médica, del cuido y cariño brindado por sus rescatistas, ahora la perrita comienza otra etapa, y es que afortunadamente, encontró personas bondadosas que decidieron adoptarla.
Para Bery Zamora, representante de la Manada de Pick, fundación que rescató a Esperancita, la lucha fue dura pero se logró el objetivo de darle una segunda oportunidad.
“Imposible escribir sin lágrimas mi amada Esperancita. La lucha fue tan dura, pero lo logramos. Son lágrimas de felicidad y alegría porque tendrás la vida que mereces”, publicó Zamora en sus redes sociales.
De igual manera, la rescatista asegura que nada de esto sería posible sin la ayuda de personas altruistas que, con lo que pueden, contribuyen para que más perritos en condición de calle sean rehabilitados y encuentren un hogar.