El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, continúa causando polémica por estar en desacuerdo con las medidas de distanciamiento social de las personas e higiene para combatir el coronavirus. El mandatario califica al COVID-19 como una «gripecita» y promueve las aglomeraciones.
En esta oportunidad, el jefe de Estado asistió a una protesta que se concentró frente al Cuartel General del Ejército en Brasilia para pedir una intervención militar y el cierre del Congreso. “Estoy aquí porque creo en ustedes y ustedes están aquí porque creen en Brasil”, señaló.
“Ustedes tienen la obligación de luchar por su país. Cuenten con su presidente para hacer todo lo que sea necesario para que podamos mantener la democracia y garantizar aquello que es más sagrado para nosotros que es nuestra libertad”, agregó a sus seguidores.
Sin embargo, Bolsonaro comenzó a toser y tuvo que retirarse del lugar. El mandatario retó nuevamente las medidas contra el COVID-19, pues no portaba mascarilla tal y como lo recomiendan los especialistas de la salud.
Hace una semana, el presidente de Brasil se dio un baño de popularidad con los ciudadanos y en el video se observa como él se limpia la nariz con su mano derecha. Con la misma extremidad estrechó la mano a una anciana y otras personas.
Además de esas dos caravanas en la mayor ciudad brasileña y de la de Brasilia, algunas ciudades del interior del estado de Sao Paulo y otras capitales regionales como Río de Janeiro, Salvador, Recife, Natal y Porto Alegre también tuvieron masiva movilizaciones a favor de Bolsonarol y contra las autoridades locales. (Líbero)
AHORA: Presidente de Brasil, Jair Bolsonaro volvió a aparecer ante miles de seguidores y también se mostró con tos durante el discurso.pic.twitter.com/3ZyOXHusnr
— Mundo en Conflicto (@MundoEConflicto) April 19, 2020
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