Buenos Aires, Argentina. – Un avión privado, un Challenger 300 (matrícula LV-GOK), que llegaba desde Punta del Este, se despistó e incrustó contra una casa en las inmediaciones del aeropuerto de San Fernando, ocasionando una tragedia que dejó un saldo de dos muertos: el piloto y el copiloto.
En la aeronave viajaban solo los dos tripulantes. Según medios de comunicación locales, la aeronave pertenece a la familia Brito; sin embargo, había sido alquilado a un tercero como vuelo charter.
La primera información, confirmada por la Municipalidad de San Fernando, indica que el avión se fue de pista, se incrustó en una vivienda y allí se originó el incendio.
Por el momento, se desconoce el motivo del accidente y la cantidad de heridos.