Al menos 30 personas han fallecido durante los últimos días a causa del consumo de alcohol adulterado en Costa Rica, informan las autoridades del Ministerio de Salud de ese país.
Todos los casos se registran en el mes de octubre, siendo de estas 27 hombres y tres mujeres. Ante esta situación se ha procedido a realizar diferentes inspecciones en más de 300 establecimientos farmacéuticos.
Los procedimientos desarrollados por las autoridades costarricenses han dejado como resultado la incautación de, al menos, 16,000, unidades de este producto ilegal.
Las víctimas tienen edades de 23 a 75 años, detalló la Unidad de Vigilancia de Salud de Costa Rica, siendo 18 de la capital, San José, siendo la mayoría concentrada.
Debido a los múltiples casos, el Gobierno emitió alertas sanitarias advirtiendo a los ciudadanos por el «peligro para la vida» por el riesgo que generan algunos productos.
Además, se ha hecho un llamado a las personas que consuman bebidas y presenten síntomas como vómitos intensos, agitación, desorientación, ceguera, convulsiones o alteraciones visuales, que se presenten a un centro médico por sospecha de intoxicación.