Foto: Archivo
El prófugo diputado del Parlamento Centroamericano (PARLACEN), Norman Quijano, se ha defendido tras perder el fuero constitucional.
El parlamentario de ARENA, que está en Honduras desde el pasado 30 de abril, ha salido a brindar declaraciones por primera vez desde que salió del país.
Quijano se justificó argumentando que se “ha consumado un atropello más a mis derechos fundamentales como ciudadano”, tras su desafuero.
En declaraciones a un diario impreso de circulación nacional, el parlamentario acusado de negociar con pandillas adelantó que tomará acciones legales.
“Recurriré a las instancias Internacionales pertinentes para hacer valer mis derechos”, ha anticipado Norman Quijano.
Con el desafuero, Norma Quijano debe enfrentar las acusaciones de agrupaciones ilícitas y fraude electoral en su contra como cualquier ciudadano.
Durante la sesión plenaria de desafuero, los diputados concluyeron que hay pruebas de que Quijano entregó $100,000 a la MS-13 y $50,000 a cada facción del Barrio 18.
Además, ofreció a los cabecillas de las pandillas reducir los operativos de la Policía Nacional Civil (PNC) en las zonas en las que esas estructuras tienen presencia.
Así mismo, Quijano negoció con los cabecillas de las organizaciones terroristas que podían matar a dos salvadoreños por día.