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La Academia Estadounidense de Pediatría ha recomendado el uso universal de la mascarilla a partir de los dos años, porque son más vulnerables a contagiarse de la variante Delta del COVID-19.

Actualmente, en Estados Unidos se registra un incremento de hospitalizaciones pediátricas por el coronavirus. El mes pasados se contabilizaron más de 300 ingresos diarios de niños por la enfermedad.

Según el el doctor Mark Kline, del Hospital de Niños de Nueva Orleans, el aumento de hospitalizaciones de menores por el COVID-19 se debe a la variante Delta, por su alto índice de transmisión y la complicación que genera a través de sus síntomas.

«Había un mito de que los niños eran de alguna manera inmunes, pero ha quedado muy claro que los niños están muy afectados», aseguró Kline.

En el caso del El Salvador, José Fernando Orellana, pediatra neonatólogo del Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS) explicó que los que tienen problemas respiratorios como asma son más afectados a la variante.

Orellana detalló a Diario El Salvador que menores que padecen leucemia, anemia o cáncer corren riesgo a contraer la variante Delta.

«Los síntomas de la COVID-19 en los niños pueden ser un vómito, o que les dé diarrea, pero hay un 4 % que dice que se va a complicar por neumonía por la COVID-19», explicó el médico.