(Foto/Agencias)
Un mes después de la primera persona que perdió la vida imputado oficialmente al coronavirus, la epidemia continúa extendiéndose y ya se ha propagado a unos 20 países. El jefe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) lo ha expresado de manera clara al considerarla como una «amenaza muy grave» para el mundo.
Según el último balance oficial la cifra es de 1,016 personas han perdido la vida en China continental. Las autoridades sanitarias chinas anunciaron 108 nuevos fallecimientos en 24 horas, el balance diario más importante registrado hasta ahora.
El número de contaminaciones confirmadas es de 42 mil. Ante esto, la OMS teme que los casos de transmisión fuera del país aumente su propagación a través del mundo.
Le preocupa por ejemplo el caso de un británico que nunca viajó a China y que fue contaminado en Singapur antes de transmitirlo en Francia. Así lo manifestó el Dr Tedros Adhanom Ghebreyesus, director de la OMS.
«La
detección de este pequeño número de casos podría ser la chispa que
se convierte en un incendio mayor. Por ahora, es solo una chispa.
Nuestro objetivo sigue siendo la contención. Hacemos un llamado a todos
los países para que aprovechen la oportunidad que tenemos para evitar
un incendio mayor.»
En Asia, miles de viajeros además de la tripulación, se hayan confinados a bordo de dos cruceros. 135 caso de contaminación fueron confirmados en uno de ellos, el «Diamond Princess», actualmente en cuarentena frente a las costas japonesas.
Los ministros europeos de sanidad se reunirán el jueves para coordinar medidas, mientras la OMS reunirá hoy y mañana en Ginebra a un grupo de expertos.
Ante esta situación, un grupo de investigadores del Imperial College de Londres es el primero en estar haciendo pruebas con ratones de una vacuna contra el nuevo coronavirus, con la esperanza de tenerla disponible para finales de año.