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Por: Agencias
20 abril, 2022

En la actualidad muchos padres recurren a “terapias de conversión gay” para ayudar a sus hijos a mantener sus preferencias sexuales dentro de los estándares.

Danne, una colombiana que relata su experiencia tras ser sometida por sus progenitores a este tipo de terapias, cuenta con nostalgia y mucho dolor, la desagradable historia en la “terapia de conversión gay”.

“Mis padres me llevaron a una Iglesia católica, donde me hacían exorcismos que duraban horas y al final me preguntaban si seguía siendo gay”, detalló Danne.

La colombiana de 29 años, describió durante una entrevista que el proceso al que fue sometida le ha causado un gran trauma.

“Me echaban cenizas y me decían que mi espíritu estaba marcado y que había que limpiarlo”, dijo la joven.

Según el relato de Danne, fue a la edad de 11 años cuando sus padres identificaron que era gay, cuando ni siquiera ella entendía lo que eso significaba.

“Yo sólo sabía que me gustaban otros niños y que quería cosas diferentes a las que querían mis hermanos. Escucharon una conversación que tenía con un amigo, nos interrumpieron y luego empezaron a hacer muchas preguntas “, detalló en la entrevista a un medio internacional.

Ante este contexto, los padres de Danne, realizaron diversas investigaciones sobre el tema, finalmente encontraron el proceso de la terapia que supuestamente corrige la sexualidad.

Dicha terapia estaba apegada a lo religioso y espiritual, los padres ignorantes de las imposiciones a que sería sometida la joven, aceptaron los procedimientos.

Describió que su primera sesión duro un poco más de una hora, fue en una iglesia católica, varias personas pusieron las manos sobre su cabeza y la echaban hacia atrás, luego le preguntaban si seguía siendo gay.

Meses después de la primera terapia, fue llevada a un retiro espiritual, donde fue sometida a un exorcismo y la hacían rezar por largas horas, hasta que se sintió obligada a decir que ya no era gay.

Danne mantuvo oculta su orientación sexual por mucho tiempo, para poner fin a las torturas de la terapia, sin embargo, se informó sobre la situación, hasta que finalmente habló con sus padres, les declaró la verdad y actualmente ellos le apoyan en su preferencia sexual.

En el presente, Danne es directora de la Fundación Gaat, la cual brinda asistencia a la comunidad trans, denunciando todos los procedimientos de reoritención sexual.

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San Salvador, El Salvador

Redacción

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