Un 16 de abril, pero 53 años atrás, nacía la reina de la música tejana, Selena Quintanilla. A casi 30 años de su deceso, el legado de la famosa cantante sigue vivo.
La artista estadounidense de origen mexicano murió a los 23 años, un 31 de marzo de 1995, tras ser asesinada por quien creía era su amiga y presidenta de su club de fans, Yolanda Saldivar, durante un altercado en el Days Inn Motel de Corpus Christi.
Conocida por éxitos como “Amor Prohibido”, “Bidi bidi bom bom” y “No me queda más”, se consolidó como un ícono latino, cambiando el paradigma de las mujeres en la industria.
Fue tal su impacto, que se convirtió en la única artista femenina en tener cinco álbumes al mismo tiempo en la lista Billboard 200. Sus éxitos continuaron, incluso después de su fallecimiento, al convertirse en la cantante más “descargada” digitalmente en el 2015.
Desde su muerte, Selena permanece como una de las artistas latinas que más discos ha vendido en todo el mundo -unos 90 millones-, sólo superada por Gloria Estefan y Shakira, y la revista Billboard la acreditó como la mejor artista latina de la década de los años 90 atendiendo a las cifras de venta de sus álbumes.
Billboard sitúa a Selena en la tercera posición de la lista de los mejores artistas latinos de todos los tiempos, tras Enrique Iglesias y Luis Miguel, atendiendo a los registros de números 1 de la publicación estadounidense.

