En un gesto simbólico, tras rezar El Angelus dominical, el papa francisco dio la bendición al mundo completamente en soledad debido al coronavirus.
Francisco se asomó a la ventana e impartió la bendición para el Mundo desde la Plaza de San Pedro en el Vaticano, como habitualmente lo hace, pero esta vez el lugar, como nunca antes se había visto, estaba completamente vacío.
Para muchos creyentes es esperanzador el acto, pues ocurre en medio de la pandémica enfermedad que tiene al mundo en vilo, sobre todo en Italia donde la cuarentena impuesta para detener el coronavirus es de primera necesidad los 21 mil 157 personas infectadas las más de mil 441 personas fallecidas.
En total 60 millones de italianos permanecen aislados, especialmente después de que el Gobierno decretara el miércoles el cierre de todos los comercios salvo los supermercados y las farmacias, una medida inédita en la historia del país.
El papa Francisco envió el jueves por video un mensaje tocante a los gobernantes del mundo ante la pandemia. “En este momento las autoridades se sienten solas. No es así. Estamos con ustedes, oramos por ustedes”, dijo.
La mayoría de las ciudades italianas están desiertas, en Roma, Milán, Florencia, Venecia las calles, plazas y medios de transporte están vacíos y el silencio resulta angustiante, pues Italia es el país de Europa más afectado por el coronavirus.
