El oficial del Departamento de Policía de Coon Rapids, en Minesota, Estados Unidos de América, Eric Prindle, recibió el 17 de abril una llamada ordinaria cuando un habitante de la ciudad le pidió capturar un perro «del tamaño de un zorro» en el patio de su casa, informó el medio internacional RT en Español.
El animal se había ido cuando Prindle llegó, pero poco después lo vio en otro patio cercano, pero cuanto se acercó al animal se dio cuenta de que no era un perro, como se creía, sino que se trataba de un zorro blanco.
“Comenzó a caminar hacia mí con indiferencia”, afirmó el oficial. Según Prindle, el animal no parecía asustado y cuando él dio un golpecito en su pierna, como si llamara a un perro, el zorro le siguió hasta el coche. “Volví a mi vehículo y abrí la puerta, y él no lo dudó y se subió justo a la parte de atrás”, explicó Prindle.
El agente Prindle señaló que el animal “en realidad era muy amistoso” debido a que era una mascota. Resultó que el zorro, de nombre ‘Akela’, tiene una familia con la que vive desde hace casi un año. “¡Estamos agradecidos de que estuviera a salvo y vivo!”, dijo la dueña del raposo, Veronica Amenrud.
“El zorro estaba súper emocionado de ver a su familia”, afirmó Mikayla Raines, la dueña de la organización protectora de esta especie Save a Fox, en la que permaneció ‘Akela’ hasta que sus dueños lo recogieron el 19 de abril. “Los zorros realmente se encariñan con sus amos”, explicó Raines.
De acuerdo con Amenrud, ‘Akela’, a quien le encanta mirar por la ventanilla del automóvil, disfrutó del viaje a casa y ahora está bien.