Foto: Imagen de Referencia.
El 15 de marzo pasado, las autoridades de Disney World decidieron cerrar sus parques para evitar la propagación del coronavirus. Sin embargo, un hombre oriundo de Alabama, ingresó igual y se instaló en una isla abandonada para pasar la cuarentena. Fue detenido el jueves pasado por la policía local.
A Richard McGuire, de 42 años, no le importaron las medidas de aislamiento decretadas por el gobierno de Donald Trump, ni las rejas o los carteles de «no pasar». El hombre usó un pequeño barco del famoso parque temático para llegar hasta una parcela de tierra que fue comprada por la empresa para armar un parque de vida silvestre llamado «Isla del descubrimiento», que albergaba pájaros, monos y caimanes. Pero que se encontraba abandonada desde 1999, cuando todos los animales fueron reubicados en el parque Animal Kingdom.

Según informó AFP, este estadounidense declaró que llegó al lugar el lunes pasado y que había planeado acampar allí por una semana. Además, le aseguró a la policía que no había notado los anuncios que le prohibían el acceso y que pensó que se trataba de un «paraíso tropical».
Los efectivos llegaron hasta la isla a bordo de un helicópotero y usaron el sistema de sonido del parque para intentar comunicarse con McGuire. Sin embargo, él dijo que «no los vio ni escuchó porque estaba dormido en uno de los edificios de la isla».
Por esta insólita aventura, McGuire irá a juicio el próximo 3 de junio, donde enfrentará cargos por intrusión, un delito menor. Mientras tanto, fue puesto en libertad después de pagar una fianza de 500 dólares.