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Un estudio desarrollado por la Open University, de Reino Unido, evidencia que las parejas sin hijos tienen relaciones más estables.

Según los resultados del citado estudio, las parejas sin hijos se sienten más valorados por su cónyuge y están más satisfechos con la relación.

Sin embargo, los resultados son distintos cuando se trata de las mujeres, quienes experimentan un menor nivel de felicidad general, en comparación con las que tienen hijos.

El estudio concluye que las mujeres con hijos experimentan un mayor nivel de felicidad, esto incluso si la relación con su pareja llega a romperse.

En el extremo opuesto se encuentran los hombres, quienes pusieron a su pareja como su prioridad.

Los hombres se quejaron más que las mujeres por la falta de relaciones íntimas y los padres solteros afirmaron ser, en su mayoría, más felices que los casados.

Más de cinco mil personas de distintas edades participaron en este estudio, que duró un período de dos años.