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La última aparición pública del papa Francisco, fallecido, este lunes, a los 88 años de edad, estuvo marcada por la sorpresa y esperanza del mundo católico, pues millones de personas en el mundo pensaron que su presencia en el balcón de la basílica de San Pedro era un signo de su mejoría y que volvería poco a poco la cotidianidad.
Sin embargo, esa aparición promisoria de esperanza se convirtió en la última, siendo su participación en la misa de Pascuas la última vez que se le vio públicamente en el sitio donde por 12 años habló al mundo del amor de Dios.
En silla de ruedas y sin el oxígeno suplementario, el papa Francisco realizó la tradicional bendición “Urbi et Orbi”, donde hizo un contundente llamamiento por la libertad religiosa como condición indispensable para la paz en el mundo.
“No puede haber paz sin libertad de religión, libertad de pensamiento, libertad de expresión y respeto por las opiniones de los demás”, afirmó el sumo pontífice en lo que fue su última aparición ante el mundo durante una misa.
Tras lanzar su bendición “Urbi et Orbi”, el papa descendió a la plaza y la recorrió con los fieles que lo vitoreaban y felicitaban a bordo del “papamóvil”. La caravana salió de la plaza unos trescientos metros, pasando frente a la sede de la embajada argentina ante el Vaticano, y regresó.
Al regreso, el Papa lucía un tanto cansado. De inmediato regresó a su residencia en Santa Marta, en el interior del Vaticano, donde finalmente perdió la vida a las 7:35 horas de Roma.
Les compartimos el video de su última aparición pública:
El papa Francisco pasó 38 días hospitalizado por una neumonía bilateral, y finalmente recibió el alta el 23 de marzo, por lo que se mantuvo ausente en la mayoría de las celebraciones por la Semana Santa.