Por: Agencias

Foto internet.

Al igual que los videojuegos pueden convertirse en una adicción, la práctica sexual tiene la capacidad de establecerse como un patrón de conducta muy arraigado.

Estudios internacionales han establecido que en estos tiempos «hablar de sexo no debería hacerte sentir incómodo». A excepto con quienes son asexuales.

Explican, también, que mantener relaciones íntimas es algo normal e, incluso, beneficioso para la salud, aunque debe de hacerse con moderación, al igual que todas las cosas.

De acuerdo con el portal «merca2.es», la adicción por la práctica sexual es igual que con las drogas o los videojuegos.

Una de las características que podría delatar a un adicto sexual sería dejar las obligaciones laborales o desatender la vida diaria para tener un encuentro íntimo.

En el artículo publicado por dicho portal, se asegura que es un error pensar que los adictos al sexo son «depravados», ya que se trata de una adicción como cualquier otra.

Pero la misma debe tratarse por medio de especialistas o por terapias.

Como segunda característica que establece que una adicción prevalece por sobre el resto de las cosas o de rutinas: «lo quieres ya y ahora» sin importar el precio a pagar o las consecuencias.

Un adicto al sexo no es capaz de salir a la calle a dar un paseo sin «activar el modo depredador», buscando una posible pareja para tener intimidad.

No le importa la hora o el lugar, la idea es cubrir esa necesidad.

En otra característica, un adicto hace cualquier cosa con el fin de conseguir la meta de sostener una relación sexual con determinada persona, aunque eso perjudique amistades o el bolsillo, incluso el trabajo.

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San Salvador, El Salvador

Redacción

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