Por: Martín González

Foto: Cortesía.

A miles de kilómetros, en algún punto de Sydney Australia, El Salvador está orgullosamente representado por una mujer decidida y valiente que pese a las adversidades decidió emprender y ahora es una exitosa empresaria.

Se trata de Myra Pérez, quien desde muy pequeña viajó con sus padres hasta el otro lado del mundo por varias dificultades que en el país se vivían.

Actualmente la salvadoreña es la Gerente de su propia empresa la cual se dedica a ofrecer hermosos arreglos de flores naturales para diversas ocasiones.

Pérez es el cerebro y el alma creativa detrás del negocio, y su influencia está en todas partes. Incluso hasta en el nombre, que es una versión abreviada de ella: “My Violet”.

Al ingresar al estudio de My Violet en el centro de Sydney, los clientes quedan fascinados pues el olor a flores frescas y toques de color en cada esquina los saludan de inmediato. Floraciones de todas las formas, tamaños y matices llenan el espacio.

«No muchos pueden decir que les encanta ir a trabajar, pero me siento increíblemente afortunada de estar haciendo lo que amo», dijo en una entrevista la destacada empresaria.

Sus arreglos son audaces. Ella prefiere tonos oscuros y ricos sobre pasteles, aunque las orquídeas son sus favoritas para trabajar. Ramas, frutas y verduras también ocasionalmente aparecen, prestan textura y contrastan con los ramos

«Amamos las flores, y se nota en cómo las arreglamos», dice Pérez. «Siempre ha sido muy importante para mí dejar que la flor te guíe, porque tu trabajo es hacer que brille».

Antes de ser quien es, Pérez trabajó para otra floristería por más de una década antes de partir para comenzar su propia empresa en 2012. Ella recorrió la ciudad tocando puertas para presentarse, y se inscribió en cada feria de novias que pudo encontrar.

«Mi esposo siempre ha sido mi mayor defensor, y fue el que sugirió que comenzara mi propio negocio», dice Pérez con cariño. «Hicimos lo que pudimos para hacer que todo sucediera: hacer que un sueño se hiciera realidad y durara».

Y así fue, su trabajo es tan destacable que incluso  ha aparecido en portadas de revistas y ha sido comisionado para bodas de alto perfil, pero tomó años de arduo trabajo llegar a este punto.

«No hay una temporada que no nos guste, porque cada una trae una sorpresa de las novedades», dice Pérez. «Una mujer sabia me dijo una vez:» Una buena florista puede hacer algo de la nada «, así que en realidad todas las estaciones ofrecen hermosas opciones», culmina la exitosa salvadoreña.

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San Salvador, El Salvador

Redacción

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