Por: Agencias

(Foto/ Redes Sociales Facebook Asociación de las Bienaventuranzas )

Ya repartieron 15 mil canastas y ahora irán por más, para todos quienes no pueden trabajar debido a la cuarentena. Junto a los alimentos, el sacerdote dejó una virgen traída desde Brasil, para que cuidara de ellos.

Perú es uno de los países que ha logrado frenar momentáneamente el avance del coronavirus. Con poco más de 800 infectados, una de las medidas que han tomado es la cuarentena. Lamentablemente este confinamiento afecta a la economía nacional, el trabajo de las personas y sus ingresos, quienes más se ven afectados son las familias de bajos ingresos.

Ane esto, un sacerdote y un grupo de voluntarios partieron a repartir más de 15 mil canastas de alimentos para las familias pobres y damnificadas por el Covid-19. Entre aquellas familias, estaba la del primer caso de la zona, donde 9 integrantes están en cuarentena, con varios niños sin alimento y el padre hospitalizado. Junto a ellos, el padre dejó una virgen, para ayudarles todavía más.

El padre Omar Sánchez es el director de la Asociación de las Bienaventuranzas y hace unos días había anunciado el reparto de 15 mil canastas de alimentos y víveres para las familias pobres de Lima Sur, que además no pueden trabajar por la cuarentena del coronavirus.

Ya repartieron el primer lote, pero eso no los detendrá y continuarán con su cruzada de solidaridad.

En tiempos oscuros, donde reina la incertidumbre, la tristeza y angustia, aparecen los verdaderos héroes. Esas buenas personas, con vocación y solidaridad, ellos son la luz en todo este caos.

Así como se ha dicho en innumerables ocaciones, al Covid-19 lo vencemos entre todos, con solidaridad, responsabilidad y amor.

Entre los damnificados, está la familia donde se detectó el primer caso de la zona, que tiene a 9 de sus integrantes en aislamiento y al padre hospitalizado, además de niños y pequeños sin alimento. La ayuda era absolutamente necesaria.

Muchas personas colaboraron haciendo donaciones, con dinero y alimentos, además de ir personalmente junto al padre.

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San Salvador, El Salvador

Redacción

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