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En un caso confuso, una empleada de Cancillería ha sido acusada por la Fiscalía General de la República (FGR) de aprovecharse de su cargo para tratar de quedarse con una recién nacida costarricense, sin el permiso de la madre.
Se trata de Claudia Esperanza Garza, quien junto a su esposo, Nils Sjard Shultz, habrían alterado el estado familiar para apropiarse de forma irregular de la niña en 2016.
La Jefa de la Unidad Especializada de Trata, Violeta Olivares, informó en esta mañana durante una entrevista radial que hoy se realizará la vista pública contra los acusados a quienes se les acusará de los delitos de Suplantación del Estado Familiar y Falsedad Ideológica.
La fiscal asignada al caso afirmó esta mañana en los tribunales que los señalados contactaron a la víctima «por medio de una plataforma de adopciones fraudulentas y le dice que ella puede dar un hogar estable (a la niña)…».
Como empleada de Cancillería, Garza habría asegurado a la víctima algunos beneficios. «…Hace una carta, obviamente falsa, diciendo que el Estado de El Salvador le había dado una pasantía acá en el país», sostuvo la fiscal.
Las partes participan en la audiencia en el Juzgado 4o. de Sentencia de San Salvador.
