El fiscal general, Douglas Meléndez, busca ser reelegido por tres años más al frente de la Fiscalía General de la República (FGR) y para lograrlo uno de sus principales argumentos es el buen uso que le ha dado durante su administración a la intervención telefónica como herramienta de investigación en casos importantes.
«La intervención de las telefonías ha resultado una excelente herramienta de investigación en los hechos delictivos para la Fiscalía, por lo que su utilización en juicios ha sido fundamental y determinante al momento de emitir sentencias», afirma Meléndez.
A juicio del fiscal, utilizar las escuchas ha permitido resolver casos destacados relativos a maras, sobornos, el narco, entre otros.
Como ejemplo, Meléndez puso el caso denominado Operación Jaque, donde se golpeó las finanzas de la Mara Salvatrucha (MS-13) y se logró condenas de hasta 350 años tras las rejas contra los líderes de esa estructura.
Gracias a las escuchas, durante el juicio el juez del caso pudo escuchar como estos lideres de la MS-13 planificaban los actos vía telefónica, lo que fue clave para lograr las condenas.
Otro caso en el que las escuchas telefónicas han sido importantes es el que involucrada al exfiscal Luis Martínez. Donde por medio de las escuchas se descubrió como el anterior titular de la FGR pactaba con abogados, exfuncionarios y el empresarios para beneficiarlos a cambio de pagos.