El presidente del Tribunal de Ética Gubernamental (TEG), Néstor Castaneda, ha sido denunciado por estafa por parte de un empresario santaneco luego que, en 1997, cuando Castaneda ejercía como notario autorizó la venta de una hacienda en Ahuachapán a favor de la empresa Tecana, S. A. de C. V., una sociedad creada por sus padres y en la que él y sus hermanos tienen acciones.
De acuerdo con la denuncia, el presunto delito se cometió hace 21 años cuando Castaneda se hizo dueño de la hacienda de 70 hectáreas que había sido entregada como garantía por un empresario a cambio de un préstamo de dos millones de colones que no pagó en el plazo estipulado.
Una publicación de El Faro se detalla que el trámite fue una “venta con pacto de retroventa”, que es una especie de préstamo hipotecario muy favorable para el prestamista, tanto así que esa práctica ahora está prohibida en El Salvador, tras la entrada en vigencia de la ley contra la usura de 2012.
El artículo nueve de esa ley prohíbe a los notarios “autorizar instrumentos en que resulte o pueda resultar algún provecho directo para ellos mismos o para sus parientes dentro del cuarto grado civil de consanguinidad”, en caso de infringir esa norma, el instrumento es nulo.
No obstante, Castaneda reconoció a periodistas de El Faro que él tramitó esa compraventa, aunque aseguró no haber violado ninguna ley.
La hacienda es disputa es reclamada por Mauricio Menéndez Graniello , uno de los hijos de aquel empresario que perdió en un préstamo con la sociedad Tecana. La hacienda, que originalmente fue de 124 hectáreas, está ubicada entre los municipios El Refugio y Atiquizaya, en Ahuachapán.
Menéndez sostiene que su padre le donó la hacienda a él y sus tres a través de una escritura de donación el 28 de agosto de 1980. Pero debido a problemas económicos, su padre Pedro Menéndez lo utilizó como garantía de un préstamo ante la sociedad creada y dirigida por la familia de Castaneda.
El préstamo fue de alrededor de 2 millones de colones en un plazo de seis meses, pero debido a que Pedro Menéndez no pagó en el tiempo estipulado la familia del presidente del Tribunal de Ética Gubernamental (TEG), se quedó con la propiedad y desde entonces le ha sacado provecho con el cultivo de caña de azúcar.
El notario que autorizó esa compraventa fue Néstor Castaneda, dueño del 19 % de las acciones de Tecana.
Mauricio Menéndez ahora se queja de que Castaneda se aprovechó de su padre, afectado por una enfermedad, para hacerse del terreno, y pone en duda que Tecana haya tenido la capacidad económica para entregar el dinero que se presume fue prestado a Pedro Menéndez. Según el denunciante, la entrega de ese dinero nunca ocurrió.
En el escrito ante la Fiscalía General de la República (FGR), la denuncia sostiene que Néstor Castaneda “mediante ardid o engaño” convenció a Pedro Menéndez Castro, para firmar esa “compraventa con pacto de retroventa” que terminó por darle el terreno a la familia Castaneda, a través de su sociedad Tecana. La denuncia también reclama cinco millones de dólares en compensación, porque considera que la sociedad Tecana, es decir, la familia Castaneda, ha explotado el terreno con la siembra de caña de azúcar desde hace 21 años. (Con información de El Faro)