Foto: Medios internacionales.

La conmovedora historia de una enfermera que hace manos falsas con guantes quirúrgicos rellenos de agua tibia, con el fin de alentar a sus pacientes contagiados por coronavirus, ha traspasado fronteras.

Este admirable hecho ocurrió en un centro hospitalario de Brasil, donde Semei Araújo Cunha, mostró su sensibilidad ante el triste aislamiento que deben enfrentar los pacientes covid.

Si bien es cierto, lo más horrible para una persona que se encuentra hospitalizada a raíz del mortal virus, es el hecho que sus seres amados no pueden hacerle compañía por el riesgo al contagio.

Y según Araújo, el sentir algún tipo de estimulación o la impresión de no estar solo en la Unidad de Cuidados Intensivos (USI), podría lograr un milagro y animar al enfermo para que siga batallando por su vida.

“No son solo los medicamentos, la higiene o la alimentación lo que ayuda. El paciente no está aquí porque quiere, sino porque lo necesita. Por eso es importante tener empatía”, expresó durante una entrevista Semei.

En ese sentido, la profesional de salud tomó la iniciativa de hacer algo dentro de sus posibilidades.

Así fue como se le ocurrió la brillante idea de llenar con agua tibia unos guantes quirúrgicos, luego amarró las puntas de los dedos, creando una falsa mano que seguramente es de mucha ayuda para los dolientes.

Por otra parte, el invento de la enfermera no sólo ayudará al estado de ánimo de los afectados, además, contribuirá a que los mismos logren mantener la temperatura corporal.