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Por: Agencias
23 octubre, 2018

Evan, de Nueva Jersey, Estados Unidos, cumplió cuatro años y su mamá le organizó un gran festejo en el salón de fiestas Chuck E. Cheese’s. Para celebrarlo junto a él, invitó a al menos 30 niños, pero nada salió como Angel Kazanis había planeado: no fue ninguno de los amigos de su hijo.

Todo estaba previsto para que sea el gran día de Evan, con comida, un pelotero y juguetes para que los chicos se diviertan. «Mi hijo miraba la puerta todo el tiempo esperando a que alguno de sus amigos entrara, vi la decepción y la tristeza en el rostro cuando pasaban los minutos y nadie aparecía», relató Angel al medio Inside Edition con el corazón roto. No está claro el motivo de la ausencia masiva, si fue un error involuntario o si se trató de algo deliberado contra la familia del pequeño. Lo concreto es que el niño de cuatro años estaba solo en el salón.

Los trabajadores del local tampoco pudieron ocultar la amargura de la situación y Taylor Inzinna, una de las trabajadores, tuvo que ir corriendo a la cocina porque no aguantó las lágrimas. «Estaba muy molesta. La mamá manejó mucho mejor la situación que yo, nunca le demostró a Evan que estaba enojada y lo contuvo, lo que creo que fue asombroso», dijo la mujer.

Pero Taylor quería salvar el festejo del niño de alguna manera y celebrar su cumpleaños como correspondía. Por ello publicó en Facebook la historia de Evan, sin que Angel supiese, y pidió a todos sus seguidores que la ayuden a pagar otro festejo: «A los tres o cuatro días ya teníamos como 13 regalos».

Al poco tiempo, Taylor se contactó con Angel. Le dijo que desde Chuck E. Cheese’s querían hacer sentir especial a Evan  y le preguntó si podían volver al salón de fiesta ellos dos, pero nunca le dijo de qué se trataba ni mencionó los regalos.

«El día que Evan volvió al salón y vio lo que armamos para él, noté la sonrisa en su rostro que era todo lo que quería», contó la mujer, y agregó: «Tenía un objetivo que ese día él fuera feliz y así fue».

Por su lado, Angel se emocionó aún más cuando vio la cantidad de regalos que los trabajadores del local habían conseguido para su hijo: «Me sorprendió, tuve que evitar llorar. No quería que él viera cómo me afectaba esto. Lo hicieron sentir como si fuera el niño más importante de todo el mundo».

Taylor compartió el festejo en sus redes sociales, con fotos de Evan y sus compañeros vestidos de diferentes personajes. Inmediatamente, la publicación se llenó de elogios hacia ella y repudiaron a los padres de los amigos del nene por no llevarlos a su cumpleaños. Angel nunca contó el motivo por el que no asistieron, pero estima que a los padres «no les importó». (Nota de El Clarín)

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