La Fiscalía General de la República (FGR) indaga sobre los efectos que podría generar en el país la ruptura de las relaciones con Taiwán y el establecimiento de lazos con China Popular.

Así lo estableció el titular del Ministerio Público, Douglas Meléndez. «Estamos analizando si abrimos un expediente para averiguar qué es lo que está ocurriendo en relación al rompimiento de relaciones con Taiwán» dijo ante los medios de comunicación.

Fue el pasado 21 de agosto que el Gobierno hizo oficial el establecimiento de relaciones con la República Popular de China durante la emisión de un mensaje a la nación por parte del presidente Salvador Sánchez Cerén.

Desde ese momento surgió una polémica en diferentes sectores del país, por la decisión tomada respecto al cierre de relaciones con Taiwán.

Entre las críticas hechas al Gobierno de El Salvador (GOES) se encuentra la petición de una millonaria cantidad de dinero como cooperación para mantener las relaciones, según la información emitida desde Taipéi.

Además fuentes del gobierno taiwanés sostuvieron que el FMLN buscaba que se les financiara la campaña presidencial para el próximo año, lo cual ha sido negado por los funcionarios efemelenistas.

Sin embargo, ahí no terminan los hechos que podrían afectar negativamente al país. Se hizo otro señalamiento y éste se trata de que entre el acuerdo de El Salvador y China existe un punto sobre la construcción de una base militar extranjera cerca del Puerto de La Unión.

De concretarse esto podría significar un riesgo para la soberanía del Estado. Aunque el canciller Carlos Castaneda y otros funcionarios del FMLN rechazaron esas acusaciones emitidas por Taiwán.

Ante el panorama descrito, Meléndez aseguró que tiene a dos fiscales revisando las acusaciones al GOES.

Se indaga, «si hay algún elemento que pueda indicar que puede haber una lesividad a la soberanía del Estado y a la seguridad jurídica de nuestro país», sostuvo el fiscal general.